El sol durante el verano nos ha aportado muchos beneficios: mayor síntesis de vitamina D, repercutiendo muy positivamente en la prevención de la osteoporosis, liberación de endorfinas, un color saludable, etc… Sin embargo, también nuestra piel está más castigada por la exposición a la radiación solar, al cloro de la piscina, a la sal del mar, a las altas temperaturas. Todos estos factores externos provocarán sequedad y deshidratación en nuestra piel. En el caso del sol, también puede provocar quemaduras, envejecimiento prematuro de la piel o incluso cáncer cutáneo.

Una vez terminado el verano, la Asociación Española de Dermatología y Venerología (AEDV) recomienda realizar un cuidado más exhaustivo de la piel, que puede haber sido dañada durante el periodo estival.

La AEDV recomienda seguir una serie de consejos para recuperar la salud de la piel después del verano:

• Seguir usando el protector solar diariamente antes de salir a la calle, aunque el verano haya terminado y la exposición al sol sea menor.
• Usar limpiadores suaves que se caractericen por un pH no alcalino, una elevada tolerancia y que sean respetuosos con la piel. Salvo que se practique deporte o que haya circunstancias que lo aconsejen, lo recomendado es no ducharse más de una vez al día y que la ducha sea corta, ya que el agua aparte de arrastrar la suciedad, también se lleva consigo parte de la protección de la piel. No es recomendable frotar la piel con fuerza, ya que eliminaremos la capa protectora, dejando la piel sin defensas y en poco tiempo se verá seca y apagada.
• Realizar una exfoliación cutánea para eliminar toxinas y células muertas que son las más superficiales y castigadas por el sol. De esta forma se renueva la piel y queda preparada para recibir un buen tratamiento hidratante y aprovechar mejor todas sus propiedades. Atención con las pieles sensibles porque el producto exfoliante debe ser suave. En nuestro blog puedes encontrar un post sobre la exfoliación con arena fina de la playa.
• Puedes utilizar cosméticos con productos queratolíticos a base de ácido retinoico o hidroxiácidos, aplicar peelings, que ayudarán a la salud cutánea de tu piel.
• Hidratar la piel del rostro mediante la aplicación de productos cosméticos 2 veces al día con un hidratante específico para las características de cada piel. Pueden ser cremas o incluso serums. Ahora la piel estará mucho más seca que antes, porque ha estado expuesta al sol, a la sal o al cloro.
• Hidratación corporal: elige una buena crema hidratante corporal con componentes “humectantes” que atraigan el agua dentro de la piel y con componentes de efecto oclusivo, que sirven de barrera, para impedir la pérdida de agua epidérmica. Hidrata la piel corporal tras la ducha. Utiliza un producto adecuado para tu tipo de piel.
• Aprovecha la noche para tratar la piel según las necesidades o la edad.
• En zonas en las que la piel haya sufrido mayor agresión, utiliza cosméticos específicos que contengan antioxidantes como la vitamina C y E. Y. Sabemos que después del verano la clave es la hidratación, pero los antioxidantes también pueden ayudarnos a que nuestra piel se recupere frente a las consecuencias de estar demasiado expuestos al sol. Los productos cosméticos con vitamina C, E y A son la clave para aportar a tu piel los nutrientes que necesita.

Asimismo, la AEDV insiste en la importancia de una revisión de la piel después del verano, en busca de bultos, manchas, lunares de nueva aparición o que hayan cambiado desde la última vez, sin olvidar las heridas que no terminan de cicatrizar y que se hayan podido producir en esta época. Estas revisiones no deben dejar de hacerse tras el verano y durante todo el año, dado que como la Campaña Euromelanoma que la AEDV promueve, la aparición del cáncer de piel puede producirse en cualquier época y momento.

Es muy importante también cuidar tu alimentación

¿Estás bebiendo suficiente agua? Es lo primero que debes hacer para que tu piel esté más hidratada; Hidrátate no solo por fuera, sino también por dentro. Bebe abundante agua (es recomendable entre 1,5 y 2L diarios) o zumos naturales. Incluye en tu dieta frutas y verduras frescas. Incluye alimentos que contengan Vitamina A y C, como son las zanahorias, melón, sandía, tomate y calabaza. Seguir una dieta de este tipo también mantendrá por más tiempo tu bronceado.

Si a pesar de todos estos consejos notas que tu piel facial está tan seca que te tira y te hace daño, deberás utilizar un tratamiento de choque para evitarlo. Nuestra recomendación es utilizar mascarillas faciales que aporten un extra de hidratación.

También puede ser que durante el periodo estival hayan aparecido manchas en tu piel. Entonces es el momento de aplicar un tratamiento contra las manchas. Lo más recomendado es aplicar una crema despigmentante, pero antes de empezar el tratamiento hay que esperar que el bronceado haya desaparecido por completo.

No hay que olvidar manos y pies. Andar descalzo, con sandalias abiertas, puede hacer que los pies se resequen. Cuídalos hidratándolos en profundidad con una crema específica para pies.

Las manos, la zona más expuesta al sol y como consecuencia una de las más afectadas. Aparecen manchas y están más resecas de lo habitual. Utiliza una crema de manos específica para regenerar la piel y que por ejemplo tenga un efecto antiedad.

El cabello también necesita hidratación. Es muy importante proteger el pelo del sol, pero también lo es hidratarlo después del verano para que vuelva a tener el brillo que haya podido perder.

En la Farmacia Ayala Pauner hacemos un análisis completo de tu piel mediante un analizador validado (MDS 1000, Microcaya) y te asesoramos, desde un punto de vista farmacéutico, sobre qué productos o tratamientos son los más adecuados según tu tipo de piel y tus necesidades cutáneas. Los 4 parámetros que evaluamos y son fundamentales para un completo análisis, son los siguientes:

• Hidratación: para recomendar productos hidratantes
• Grasa-sebo: evalúa la grasa cutánea y capilar
• Elasticidad: analiza la elasticidad de la piel en función de la edad, para recomendar productos anti-edad
• Pigmentación: evalúa el nivel de melanina y el factor de protección solar recomendado. Nos permitirá saber si tu piel necesita un despigmentante

El analizador también puede evaluar cabello y uñas, siguiendo las mismas pautas que en el caso de la piel. Tras el análisis capilar, te aconsejamos sobre productos y hábitos diarios que debes seguir para evitar problemas como la caspa, la sequedad capilar, la seborrea y la alopecia entre otros.

Solo alrededor del 20-30% del proceso de envejecimiento de la piel está genéticamente determinado. El resto está bajo tu control

Cuida tu piel, es la única que tendrás