EXFOLIACIÓN DE LA PIEL CON ARENA FINA DE PLAYA

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En la playa, podemos encontrar uno de los mejores exfoliantes naturales que existen para nuestra piel: la arena. Esta ofrece un grano fino excelente para eliminar todas las células muertas y dejar la piel completamente renovada y con un aspecto mucho más cuidado y bonito. Ten en cuenta que es necesario exfoliar la piel una vez a la semana, como mínimo, para evitar que esta envejezca prematuramente y pierda luminosidad con el paso del tiempo.

La playa es un verdadero spa al aire libre en el que se pueden llevar a cabo tratamientos de belleza muy beneficioso para la piel. Por un lado, encontramos el agua de mar una increíble fuente de minerales y componentes, ideales para favorecer la regeneración de la piel y ejercer un poder curativo sobre eccemas, reacciones alérgicas, heridas, sequedad, etc. Por otro lado, también podemos disponer de la arena de la playa, un polvo muy fino que resulta ser una gran aliado para exfoliar la piel, dejarla libre de impurezas y con una apariencia radiante.

A continuación, te detallamos por qué la arena de la playa puede convertirse en unos de los mejores exfoliantes naturales para tu piel:

  1. Su grano fino es ideal para eliminar todas las células muertas que se van acumulando en la piel con el paso del tiempo, y que si no se retiran, acabarán apagando la belleza y luminosidad de la piel. Es excelente para acabar con las impurezas de la piel y prevenir la aparición de nuevas. Aporta un gran efecto suavizante y, tras su aplicación, la piel está mucho más suave al tacto. Además, contribuye en la mejora de la circulación sanguínea, por lo que puede servir para combatir la celulitis y la piel de naranja de algunas zonas del cuerpo, así como para darles una mayor firmeza y tersura a los tejidos.
  2. Para poder realizarte la exfoliación, llena un bote de arena de la playa. La arena debe ser fina, ya que si el grano es demasiado grueso podría ocasionar irritaciones en la piel. Así mismo, debes tener en cuenta que este exfoliante está indicado exclusivamente para la piel del cuerpo, por lo que debes evitar usarlo sobre el rostro o el cuello, pues en estas zonas la piel es muchísimo más delicada y sensible. Te servirá, especialmente, para eliminar las células muertas de zonas como las piernas, los brazos, el abdomen, los pies o aquellas partes en las que exista una mayor sequedad o hiperqueratosis como los codos, las rodillas o los talones.
  3. Puedes hacer un exfoliante con arena de la playa de muy distintas formas, todo dependerá de los productos con los que la combines. A continuación, te mostramos algunas de las más efectivas para renovar y rejuvenecer la piel.
  • La primera de ellas consiste en mezclar 3 cucharadas de arena con 2 cucharadas de tu crema hidratante corporal habitual; las cantidades puedes modificarlas según tus necesidades. De esta forma, obtendrás una loción exfoliante casera que además de retirar las células muertas, le brindará a tu piel la hidratación que necesita para mantenerse humectada y bonita.
  • Otra forma de prepararla es con aceite de almendras. Este producto ofrece una limpieza regeneradora, evita la obstrucción de poros y la aparición de impurezas. Además, es un gran hidratante y desinflamante que ayuda a mantener la elasticidad y flexibilidad natural de la piel. Para prepararla pon 1/2  taza de arena de la playa y 3 cucharadas de aceite de almendras; tan solo tendrás que mezclar bien ambos ingredientes hasta obtener una pasta consistente y aplicarlo sobre las zonas a tratar realizando masajes circulares suaves.
  • Otra opción es combinar la arena de la playa con aloe vera en una misma loción; la razón es que este último es un gran aliado para regenerar la piel dañada, combatir la sequedad y el tacto áspero. Así que si notas que tu piel luce apagada, con impurezas y aspecto envejecido, no dudes en probar este exfoliante. Para prepararlo, tienes que mezclar 1/2 taza de arena con 3 cucharadas grandes de gel de aloe vera, procurando que este sea lo más puro posible, y aplicarlo sobre la piel con suaves masajes circulares para dejarla impecable.

Para que el resultado sea perfecto y tu piel no resulte dañada, te aconsejamos que tengas en cuenta los siguientes pasos a la hora de hacerte la exfoliación:

Es preferible que exfolies tu cuerpo en el mismo momento de la ducha, para hacerlo sobre la piel húmeda y, así, evitar irritaciones.

Aplica el exfoliante con movimientos circulares suaves para estimular el flujo sanguíneo de la zona.

No exfolies la piel irritada o con heridas y evita hacerlo también en zonas delicadas como el cuello, la cara, los senos o la zona íntima.

Tras unos minutos, retirar el exfoliante con abundante agua tibia y, al finalizar, aplica una crema hidratante.

Si quieres potenciar los efectos de la exfoliación y acelerar la eliminación de la celulitis, puedes incluir el uso de un guante de crin.