¿Qué es la piel seca?
La piel seca o xerosis es aquella en la que existe un desequilibrio de agua y lípidos en la capa más externa de la piel: la epidermis. Causa principal: mal funcionamiento de las glándulas sebáceas y/o sudoríparas que, desde la dermis, no producen los suficientes fluidos para lubricar la piel y mantenerla protegida ante la pérdida de agua. Por tanto es una piel que no realiza bien una de las principales funciones que es ser una barrera protectora natural.
Características de la piel seca
Los síntomas que presenta una piel seca, son los siguientes:
- Aspecto agrietado, incluso con descamaciones.
- Piel fina, mate, pálida, desvitalizada, frágil. Y a diferencia de las pieles grasas, los poros están cerrados.
- Textura áspera, tensa y sin flexibilidad.
- Sensación de tirantez permanente y posibilidad de presentar picor.
- Envejecimiento prematuro de la piel. Son pieles más propensas a las arrugas y signos de la edad, pues la falta de hidratación favorece la pérdida de elasticidad, la flacidez y las marcas en la piel.
- Zonas propensas a las irritaciones y al enrojecimiento.
Factores desencadenantes de una piel seca
- Factores genéticos
- Edad
- Padecer ciertas enfermedades: dermatitis atópica, psoriasis, hipotiroidismo, etc.
- Problemas metabólicos: como tiroides, diabetes, enfermedades del riñón.
- Temperatura: el frío y el viento resecan la piel. El viento aumenta la pérdida de agua por deshidratación.
- Humedad: Los ambientes secos que producen las calefacciones y el aire acondicionado fomentan la sequedad de la piel.
- Consumo de tabaco y alcohol.
- Contaminación.
- Algunos medicamentos, como diuréticos, corticoides, anticonceptivos, etc.
- Jabón, o gel de baño: si contienen tensioactivos agresivos, arrastran la capa protectora de la piel y la resecan cuando se limpia.
- Uso de productos cosméticos inadecuados.
- Cambios hormonales.
- Radiación solar.
- Falta de hidratación: si no tomamos suficiente agua, también la piel se verá afectada.
- Una mala alimentación.
- Proceso de envejecimiento natural.
Productos que te ayudan a cuidar una piel seca
a) Limpiadores
Es fundamental que la limpieza corporal se realice con productos específicos para pieles secas, que no contengan detergentes y con un pH ligeramente ácido (pH fisiológico de 5.5). Deben eliminar la suciedad sin arrastrar el manto hidrolipídico.
En la limpieza facial se recomiendan productos que no necesitan un aclarado con agua, como las leches limpiadoras, las aguas micelares, etc. Deben contener en su formulación humectantes o emolientes, aportando ya desde la limpieza, hidratación de la piel.
b) Hidratantes y emolientes
La piel seca es deficitaria en lípidos, y por tanto hay que aportarlos con los productos tópicos de uso diario. Estos productos deben contener lípidos fisiológicos, como las ceramidas, el colesterol y los ácidos grasos esenciales. También se recomienda que tengan otros activos que aporten o retengan la humedad.
Las zonas del cuerpo más expuestas como las manos, el rostro o los labios, necesitan más cuidados.
c) Mascarillas
En ocasiones, el tratamiento hidratante y emoliente diario de las pieles secas puede no ser suficiente y es necesario utilizar productos semanales como tratamiento de choque. Son por ejemplo las mascarillas hidratantes y calmantes. Utilizándolas 2 veces por semana, te ayudarán a cuidar de forma más intensa tu piel.
d) Exfoliante suave
Cada 15 días se recomienda realizar una exfoliación suave, para eliminar células muertas acumuladas y favorecer la posterior hidratación sin obstruir los poros.
e) Protectores solares
Es necesario utilizar a diario una fotoprotección adecuada en las zonas expuestas. La exposición solar sin protección resulta agresiva para cualquier piel, pero en el caso de las pieles secas, se une además el efecto de aumentar la deshidratación y la sequedad en la piel.
También existen productos que, además de los filtros solares, incluyen otros activos con efecto protector contra la polución y otros agentes externos.
Distintos aspectos que te ayudan a prevenir la sequedad
- Protección frente al frío, viento y sol: los 3 son factores desencadenantes de la sequedad y se deben evitar protegiéndonos la piel con prendas que la cubran.
- Utilizar productos de higiene personal y detergentes no agresivos, y formulados a pH fisiológico para pieles secas.
- Utilizar diariamente productos hidratantes y emolientes ricos en lípidos para proteger la piel y calmar los picores.
- Ducharse en lugar de bañarse, una sola vez al día y usando agua tibia. Secar la piel sin frotar.
- Usar ropa de tejidos naturales como el algodón.
- Alimentación adecuada: es recomendable seguir una dieta rica en frutas y verduras que nos aporte vitaminas y antioxidantes necesarios para el mantenimiento de una piel sana. También son imprescindibles para la piel los ácidos grasos esenciales y el aporte de agua en cantidad adecuada (1,5-2 litros al día).
- Evitar alcohol, tabaco, contaminación y radiación solar ya que afectan a la barrera cutánea y además de acelerar el envejecimiento también deshidratan y resecan la piel.
- Ejercicio de manera regular: el ejercicio estimula la circulación sanguínea y aumenta la cantidad de oxígeno y nutrientes que llegan a las células de la piel. También aumenta la producción de colágeno y la regeneración de la piel.
Ante cualquier duda, consulta con tu dermatólogo o farmacéutico y te aconsejarán para tener una piel lo más saludable posible.
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